Yo soy el número trece

He descubierto que un grano de sal cura todas las heridas. He averiguado la base molecular del sufrimiento. He probado la mejor vacuna contra el virus de la tristeza. He identificado la proteína más bonita y le he puesto nombre. He visto la luz a través de los opacos ventanales del laboratorio. He buscado la verdad y he encontrado la duda. He indagado en las fibras musculares de la razón. He aprendido que después de un experimento hay que hacer otro experimento. Nunca imaginé que la naturaleza fuera tan terca. He obtenido la estructura cristalina de una lágrima. He descifrado los genes que llevan del amor al odio. He escrito brevemente sobre las familias de proteínas más humildes. He ideado un método infalible para pensar. He interpretado las señales ocultas dentro del corazón. He comprobado la dulzura de la insulina. He leído el pensamiento a una neurona sensorial. He conocido a las peores de las patologías. He adivinado el acertijo genético de alguna enfermedad rara. He elegido la hipótesis más probable y me he equivocado. He soñado que encontraba el remedio para la enfermedad que nos está matando:

Por eso, por todo eso y porque alguien tiene que seguir deshojando la flor del conocimiento, yo soy el número trece.